Campaña 'Aprender sin miedo' busca frenar los alarmantes niveles de violencia escolar

Según Pía Stavas, directora regional de Plan en Latinoamérica, "la situación es generalizada en todas las escuelas y colegios del mundo".

A Camila, de 12 años, uno de sus profesores la manoseaba y le advertía que, si no se dejaba, podía perder la materia. A Juan, de 13, sus compañeros le decían gay por no perseguir a las niñas del curso, como los demás, con un espejo en los zapatos para verles la ropa interior. A Sandra, de 14 años, la excluían por pertenecer a una iglesia evangélica. Entre tanto, a Juliana, una de sus compañeras, también la discriminaban y la perseguían solo por ser gorda. Estos niños, todos estudiantes de bachillerato de colegios de Cartagena y varios municipios de Bolívar, hacen parte de los 350 millones de menores de edad que, al año y en todo el mundo, son víctimas de violencia en las aulas. Así lo denuncia la Fundación Plan que, basada en un estudio, lanzó la campaña 'Aprender sin miedo'. La iniciativa arrancó en cuatro ciudades: Bangkok (Tailandia), Dakar (Senegal), Nairobi (Kenia) y Cartagena (desde esta última se replica a 12 países). Aunque en Colombia la nueva Ley de Infancia prohíbe cualquier tipo de castigo físico o psicológico dentro del sistema educativo, a diario hay casos de agresión de maestros a alumnos que, según Stavas, no se denuncian. Y si llegan a ser denunciados, no son investigados ágilmente por las autoridades. Lo peor, apunta Stavas, es que ocurren bajo la permisividad de muchos padres que justifican estas reprimendas. En Colombia, según se estableció a través de las pruebas Saber, tres de cada 10 niños son víctimas de agresión dentro del sistema escolar. Y en Bogotá, en el 2007, la Universidad de los Andes y el Dane hicieron un estudio con 87.750 estudiantes. que confirmó la proporción. También se identificaron 4.054 casos de ataques con armas contundentes o de fuego en el último año escolar, y 17.237 casos de acoso sexual cada mes. 'El colegio es un infierno' Según Shriley Navarro, gerente de Plan en Cartagena, preocupa la proliferación de pandillas juveniles, que, según ella, serían más de 70 en la capital de Bolívar. Estos grupos reclutan a nuevos adeptos dentro de los colegios. Gabriela Bucher, directora de Plan en Colombia, afirma que este fenómeno es casi invisible ante la opinión pública, y que no se han magnificado los daños que pueden ocasionarle de por vida a los niños. "Muchos padres mandan a sus hijos a estudiar, y no saben que en el colegio pueden encontrarse con todo un infierno", dijo Bucher. Según el informe de Plan, muchos de los niños violentados en las aulas desertan del sistema educativo, otros mueren por las agresiones recibidas y la gran mayoría crece con traumas severos. Se daña la salud física y mental de los niños, y esta situación puede conllevar a que se pierda un gran potencial que sería clave para el desarrollo de cualquier sociedad, sostiene el estudio. Bucher aclara que, aunque un alto porcentaje de estos casos se extiende de la violencia intrafamiliar que replican en el colegio, también se debe a conductas sociales influidas por malos modelos que ven en los medios. Ante la gravedad del problema, preparan hasta una ley La campaña 'Aprender sin miedo' se realizará durante los próximos tres años. En Colombia, se hará en 84 instituciones de escasos recursos. con 43 mil niños de Bolívar, Chocó, Sucre y Valle. Se escogieron estas regiones porque allí predomina la discriminación racial y de género. Aníbal Obando, educador de Tumaco (Nariño), explica que, pese a que allí el 95 por ciento de la población es afrodescendiente, hay discriminación entre ellos mismos. "El más blanquito (mulato) discrimina al que es más negro, y muchos profesores se dan cuenta de eso y no hacen nada", afirma el docente. La campaña se desarrollará a través de actividades de convivencia entre estudiantes, profesores y padres. También se pretende que los niños hagan las veces de investigadores para replicar acciones en otras regiones del país. De otra parte, en el Congreso de la República se analiza un proyecto de ley para contrarrestar este fenómeno. La iniciativa, que fue presentada por el representante a la Cámara William Vélez Mesa, propone que los colegios incluyan en los manuales de convivencia las sanciones y correcciones para aquellos que hostiguen e intimiden a sus compañeros, y que se estimule con rebajas de la matrícula a los estudiantes que durante un año se destaquen por ser los más respetuosos entre sus compañeros. El proyecto busca que los colegios diseñen políticas de prevención y conciliación directa. JOSÉ ALBERTO MOJICA P. ENVIADO ESPECIAL* CARTAGENA *POR INVITACIÓN DE LA FUNDACIÓN PLAN