El organismo internacional afirmó que Brasil crecerá un 3,4%, México un 3,3% y Chile un 5,1%. Hubo advertencias para los países en vías de desarrollo
El Banco Mundial (BM) presentó sus previsiones para el año 2013, donde estipuló que América Latina y el Caribe crecerán un 3,5% en 2013 tras el 3% del año pasado.
Según los nuevos cálculos del organismo internacional, Brasil crecerá un 3,4% en 2013 (tras un 0,9% en 2012), México un 3,3% (4%), Chile un 5,1% (5,8%),Colombia un 3,8% (3,5%) y Argentina un 3,4% (2%).
De todos los países, el que tiene mayores expectativas de crecimiento en toda la región es Panamá, en gran medida gracias a un proyecto de expansión del Canal. El Banco le atribuye un 7,5% para 2013.
A su vez, el BM advirtió que América Latina registró la peor desaceleración entre los países en vías de desarrollo en 2012.
Según señala el informe presentado, de los US$ 412 mil millones de flujo externo bruto (capitales tanto públicos como privados) que entró en los países en vías de desarrollo entre enero y octubre de 2012, América Latina y el Caribe se llevaron un tercio.
Las mediciones del Banco Mundial indicaron que en el tercer trimestre de 2012 la producción industrial volvió a recuperarse tras varios trimestres irregulares, pero a finales de año daba de nuevo señales de desaceleración.
"A medida que la región, y en particular Sudamérica, depende cada vez más de las exportaciones al Este asiático, particularmente China, el riesgo de una desaceleración mayor de lo previsto es un riesgo para los países exportadores de materias primas en particular", indicó el informe.
A su vez, el BM recomendó que "ante la persistente incertidumbre en los países ricos, las naciones en vías de desarrollo deberán proteger su crecimiento".
"No podemos esperar hasta que las naciones de ingresos altos recobren la senda del crecimiento", declaró el presidente del BM, Jim Yong Kim, en el comunicado:
Kaushik Basu, vicepresidente y economista en jefe del Banco, dijo por su parte: "Los países en desarrollo deben resistir e intentar anticiparse a cada fluctuación en los países avanzados y, más bien, velar por la solidez y capacidad de adaptación de sus políticas fiscales y monetarias a sus propias condiciones".
Por último, el informe señala que "el PIB de los países en desarrollo creció en 5,1% en 2012 y se pronostica una expansión a 5,5% en 2013”.
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