Cómo será la escuela en la era de Internet

Encuentro para reflexionar qué influencia tendrán las nuevas tecnologías en la enseñanza

3 de noviembre de 2010

"La revolución que significa Internet es comparable con la aparición de la imprenta en el siglo XV, por la modificación del uso del lenguaje que implica y el cambio en la forma de vinculación entre las personas, que generará consecuencias que aún no conocemos", afirmó el director de Políticas Culturales de la Universidad de Tres de Febrero, Francisco Piñón.

Especialistas en educación y cultura se reunieron en el Centro Cultural Borges para analizar la relación entre educación, lenguaje y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Los internautas del siglo XXI fueron el centro de un debate que intentó develar la incidencia que tendrán el uso de Internet y las redes sociales en la enseñanza futura. Además, se analizó el rol de la escuela tradicional y su adaptación al uso de las nuevas tecnologías.

El catalán Daniel Cassany, especialista en lenguas y comunicación, explicó que a pesar de que los niños tengan hoy acceso a una infinidad de documentos no logran "leerlos, comprender y darles significado". Además, advirtió que el acceso irrestricto a esa infinidad de información puede acarrear riesgos. "Por un lado, accedemos a textos que no fueron realizados para que los leamos nosotros, muy técnicos y específicos; además, nunca se sabe quién está detrás del texto ni cuál fue su intención, los niños podrían tomar como objetiva información sesgada, pues no sabemos si el que está detrás es un erudito o un loco", detalló.

Insistió, además, en que el uso de la computadora por sí sola no significa que se aprenda más, pero sí da la posibilidad a los niños de realizar cosas "increíbles". "Los niños fuera de la escuela hacen cosas buenísimas; por ejemplo, hay historias que tienen más de catorce capítulos escritas por alumnos que se sacan regular en lengua", ejemplificó.

A su turno, el sociólogo Alberto Quevedo explicó que la escuela "es hija del libro" y que para el uso de Internet "se necesitan capacidades que no se adquieren en el colegio". Luego prosiguió: "La televisión fue excluida exitosamente de la escuela, pero Internet tiene un efecto en los chicos, en su sociabilización y forma de escribir, que deja marcas en ellos".

"Estamos en medio del Big Bang, acaba de explotar y debemos esperar un tiempo para analizar las consecuencias. El desafío de la academia es tener una mirada cultural y no técnica de esto", concluyó.

Cerró el debate el análisis de Inés Dussel, investigadora en educación de Flacso. "Debemos analizar en ese momento cómo incluir a estas tecnologías en la escuela, pero si no apostamos a las TIC, estamos educando para gente que no existe."

"Debemos estar atentos a que no se quiebre el vínculo con lo viejo, lo más tradicional ?dijo Dussel?. Hoy, por ejemplo, los chicos tienen la posibilidad de sacar infinitas fotografías y colgarlas en Internet, pero ¿cómo se les enseña a guardar las que valen la pena?"

La conclusión del encuentro fue coincidente: no puede desestimarse el cambio que genera Internet en el uso del lenguaje, pero aún no puede mensurarse el impacto que tendrá en la educación.

La Nacion